18.3.12

pecado inconfesable

Ya casi no escucho discos.
Ahora si quiero música: sólo la que yo misma puedo hacer.
Pero no podría vivir sin los libros, a pesar de escribir, estoy muy lejos de conformarme con la escritura que yo sola puedo producir.
Así como leo para escribir, no necesito escuchar discos para cantar.
Necesito silencio.