24.8.12

balada


Y cuando preocupaciones más activas,
y días más polvorientos, y telarañas,
menos infrecuentes –encierren lejos lo que fue,
aún así como una balada tarareada y perdida,
recuerda amigo, y vierte una lágrima
si un trovador que fuerza la voz se arriesga a cantar.
Emily Dickinson